La ciudad de Magangué, en el departamento de Bolívar, enfrenta una grave amenaza debido a los altos niveles del río Magdalena. Las autoridades locales han alertado que aproximadamente 60.000 personas y 8.000 viviendas están en riesgo inminente de inundación, especialmente en los barrios Girardot, Versalles y Alfonso López.
El peligro se ha intensificado debido al deterioro y desaparición parcial de un dique carreteable que servía como barrera protectora contra las crecientes del río. La situación es particularmente crítica en el barrio Girardot, donde el dique ha desaparecido por completo, dejando a los residentes con una precaria defensa de bolsas de arena contra la fuerza del agua.
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) ha iniciado obras para la construcción de un nuevo dique, pero estas se han visto obstaculizadas por conflictos de propiedad con familias que residen a orillas del río. En respuesta, la Alcaldía de Magangué ha propuesto un plan de compensación de 30 millones de pesos por familia para incentivar el desalojo voluntario de las zonas de alto riesgo.

Sin embargo, los habitantes afectados consideran insuficiente esta oferta, argumentando que el monto no les permitiría adquirir una vivienda en otra zona segura. La administración municipal también ha ofrecido priorizar a estas familias en futuros programas de subsidios de vivienda.
La urgencia de la situación se ve agravada por la actual ola invernal que azota la región, aumentando la presión sobre las frágiles defensas existentes. Las autoridades locales y nacionales trabajan contrarreloj para implementar medidas que prevengan una catástrofe, mientras los residentes de Magangué viven en constante zozobra ante la amenaza del poderoso río Magdalena.


